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Parques naturales
Flora y fauna
Parques naturales de la Costa Brava
La Costa Brava es un verdadero paraíso natural donde la belleza del Mediterráneo se combina con paisajes verdes llenos de riqueza ecológica. Sus parques naturales, que protegen una biodiversidad única, hacen de esta región un perfecto refugio para los amantes de la naturaleza.
Parque Natural del Montgrí, las Islas Medas y el Baix Ter: un paraíso de biodiversidad
El Parque destaca por su gran diversidad de paisajes y ecosistemas. Aproximadamente un 75% del parque es terrestre y un 25% marino, extendiéndose por 8 municipios.
El macizo del Montgrí, una imponente formación calcárea, domina la región con su perfil característico y conserva un rico patrimonio histórico, como el castillo medieval y restos de antiguos asentamientos. Además, acoge una gran diversidad de flora, incluyendo diversas especies de orquídeas, y fauna característica como el duque, el águila perdicera y diversas especies de murciélagos.
Las Islas Medas, un archipiélago cercano de gran valor ecológico, son famosas por sus praderas de Posidonia, paredes de coral y cuevas submarinas, convirtiéndose en un destino de referencia para el submarinismo. Sus aguas albergan una gran diversidad de especies marinas, formando un ecosistema de un valor ecológico excepcional.
Playas y dunas, con más de seis kilómetros de playas naturales y sistemas dunares bien conservados, son el hábitat de especies emblemáticas como la lagartija cenicienta, el chorlitejo patinegro y flora autóctona como el lirio de mar.
Humedales y marismas, formados por la interacción de los ríos Ter y Daró con el mar, son refugios de biodiversidad donde habitan numerosas especies. La llanura agrícola del Baix Ter se caracteriza por sus cultivos, destacando los arrozales y los campos de olivos, que tienen una larga tradición.
El parque natural ofrece una amplia variedad de actividades turísticas, desde senderismo y cicloturismo a deportes náuticos y visitas culturales.
Parque Natural del Cabo de Creus: naturaleza salvaje y belleza indómita
El Cap de Creus es el rincón más agreste y fascinante de la Costa Brava, un paraje natural donde la tierra y el mar se encuentran de forma única. Sus paisajes, moldeados por el viento de la tramontana y el vaivén del Mediterráneo, crean un escenario lleno de formaciones rocosas surrealistas, calas escondidas y acantilados que parecen esculpidos por la misma naturaleza.
A tan sólo una hora en coche desde nuestro camping, el Cabo de Creus te espera para una experiencia inolvidable. Este parque natural, el más oriental de la Península Ibérica, es un refugio para quienes buscan aventura y tranquilidad. Sus senderos serpenteantes ofrecen vistas espectaculares al mar y conducen a rincones de ensueño, como Cala Culip o Cala Jugadora, perfectos para nadar en aguas cristalinas.
Pero el Cabo de Creus no es sólo naturaleza; también es inspiración. Este paisaje cautivó a Salvador Dalí, que le plasmó en muchas de sus obras. Su singularidad y magnetismo le convierten en un destino imprescindible para los amantes de la fotografía, la geología o, simplemente, para aquellos que quieren desconectar en un entorno único.